PDI investiga homicidio: Papudano de 23 años murió con un impacto balístico en su cabeza

“Vamos a continuar las indagaciones para establecer quiénes son los responsables de este homicidio”, señaló el subprefecto de la PDI de Los Vilos.

“Logramos hallar el cuerpo sin vida del joven de 23 años que estaba desaparecido desde el día jueves pasado” informó la tarde de este martes William Mora, subprefecto de la PDI de Los Vilos, en la región de Coquimbo. Manuel Arturo Figueroa Espinoza, un joven arriero que fue reportado por presunta desgracia el día sábado 10 de abril, fue encontrado sin vida y con un impacto balístico en su cabeza.

El joven, proveniente de Papudo, es hijo de Nilda Espinoza y Manuel Figueroa. A través de Facebook, la Escuela Básica de Papudo lamentó el hecho y recordó al joven. “Manuel siempre fue reconocido por ser un niño respetuoso y educado que desde Pre básica a Octavo Año, alegró nuestras aulas con su presencia. Nos adherimos al gran dolor de su madre Nilda, de su padre Manuel, de su hermana Texia, de toda su familia, amigos y conocidos”-

El hallazgo se produjo a eso de las 14 horas de este martes. Se trataría de un homicidio, señaló la autoridad policial. “Hubo intervención de terceras personas, el cuerpo presentaba un impacto balístico en su cabeza, al parecer de escopeta, eso lo vamos a indagar con lo que nos va a comunicar el Servicio Médico Legal”. De acuerdo a lo informado por el Subprefecto Mora, la PDI levantó una serie de evidencias en el lugar donde fue encontrado el cuerpo sin vida. “Las dirigencias van a continuar el día de mañana, no cesaremos como detectives en la búsqueda de la verdad, para saber quiénes fueron las personas que se acercaron a este lugar” detalló Mora.

La PDI habría recibido un testimonio clave la tarde de este lunes. “Mayores antecedentes del porqué estábamos en un lugar específico, los voy a dar a conocer luego que converse con la Fiscalía” adelantó el Subprefecto. Mientras se desarrollaban las labores de búsqueda, una serie de antecedentes ponían en duda la teoría del extravío, pues el joven arriero tenía una reconocida experiencia en este tipo de labores, “estamos hablando de un joven de 23 años, sano, que es arriero, le gusta los caballos, es muy aficionado, conoce los sectores rocosos, de montañas, de cerros”, decía el subprefecto Mora, previo al hallazgo.

“Quiero que sepan que nosotros, los detectives, vamos a continuar las indagaciones para establecer quiénes son los responsables de este homicidio”.